CAMINO CONEXO

Como la noche, te observo,

Como la luna brillante y enigmática,

Escondido en un cráter oscuro toco mi sexo,

Me rebasa tu presencia,

Tu recuerdo me abofetea todas las noches,

En las que por alguna razón divina o maldita,

El insomnio se hace presente y sin permiso,

Vagabundeo nauseabundamente por algunos retazos,

Pensamientos arcaicos y obsoletos,

Que hacen que mi hedor mental sea aun más fuerte,

Renovar y renovarme,

Sentir mí latido en la noche y el día,

Disfrazarme de arpa,

Que toques mis cuerdas bucales,

Ser fiesta en los funerales de la melancolía,

Cambiar de película y guion,

Renovar mi pelo,

Que mi piel sea la muda en toda presencia,

Que mi piel en el bis a bis que nos aguarda sea la tuya,

Que tu piel desnuda sea la fragancia de mi sala.

CAMINO CONEXO MMXII

Vuelvo a encauzarme en el camino conexo

Dejando atrás los placeres mundanos, los amigos, los enemigos

Y los bares de dudosa reputación,

Vuelvo estando ya de vuelta,

Después de montar a caballo y galopar en yegua,

Dejo el olor a campo a un lado,

Como rociero que deja atrás el polvo del camino,

Poniendo broche al llevar un ramo de rosas blancas y orquídeas

a la divina pastora.

Vuelvo al desguace humano y deshumano,

Al cementerio mental,

A la comuna de judíos arios cristianos,

A dejar volar de la psique todo lo que no huela a nicotina,

A liberar la mollera de datos y mas datos sintéticos,

A olvidar las raíces de lo que químicamente me importo,

Vuelvo a la pausa lenta,

Vuelvo a reciclarme en mago sin conejo y con chistera.